¿Buscas coche de segunda mano?, sigue estas pautas y sabrás de su estado real

      Muchas son las ocasiones en las que acudimos tanto a un concesionario como a un particular y nos encontramos con que el coche ha sufrido un buen lavado de cara, desde un repintado, ruedas nuevas, petroleado del motor, pulido, etc, para que el vehículo nos entre por los ojos, pero a la hora de comprarnos un coche debemos tener en cuenta mucho más que su apariencia y ahora vamos a desvelar algunos trucos para saber cómo decantarnos por uno u otro.

Antes de todo, ¡la documentación!

      Lo primero a tener en cuenta es la documentación, deben entregarnos el permiso de circulación que deberá estar firmado por la parte trasera y la tarjeta técnica donde indique que ha pasado la ITV

      Es recomendable pasarse por trafico para saber si el coche aún tiene la reserva dominio, la reserva dominio la tiene cuando el vehículo se ha comprado a través de una entidad financiera y hay que darla de baja para poder vender el vehículo, lo que conlleva un gasto que hay que pactar quien pagará, normalmente el vendedor, así como también debemos preguntar en tráfico si ese coche tiene cargas, lo que se puede hacer con el número de bastidor.

¿Ha llevado el vehículo un golpe?

      Solicita ver el coche limpio y a la luz del día, de esta forma, podrás observar si en la carrocería hay cambios de tono en la pintura, o una diferente textura, lo que te podrá ofrecer información sobre si ha llevado un golpe en el pasado.

      Fíjate también en las uniones entre las diferentes partes de la carrocería, por ejemplo entre el capó y las aletas o el parachoques y el portón del maletero, antes de cerrarlas comprueba si tienen holguras, desde dentro podrás observar al abrir las puertas si están descolgadas.

      Mira los focos delanteros y los pilotos traseros, que uno parezca más nuevo que el otro denotará que ha sido cambiado.

      Abre las puertas, capó y maletero y observa si por dentro ves resto de lo que puede haber sido un repintado, en el capó puedes aprovechar y mirar las jaulas que soportan la chapa para ver si están deformadas ya que después de un golpe es difícil volver a dejarlas como nuevas.

      La seguridad es otro punto a tener en cuenta, tras un golpe en el que hayan saltado los airbags, es posible que el propietario no los haya repuesto ya que su precio es muy alto, en un concesionario de la casa, mediante el escáner podrán decirte si los airbags están en óptimas condiciones.

      Observa que el desgaste de los neumáticos sea uniformes, que el neumático se desgaste más por dentro o por fuera nos indica que hay un problema en la dirección, alineación, paralelo, etc.

      Observa que también funcionan correctamente los cinturones de seguridad, deben  frenar y recogerse .

      Haz una prueba dinámica, es la mejor manera de observar vicios ocultos, prueba yendo recto a unos 60 km/h y aflojando la fuerza de las manos sobre el volante pisa el freno de forma contundente y observa si el coche se va hacia un lado o vibra el volante, no debería hacerlo, deja que el coche se detenga por completo sin dejar de frenar y si cuando el coche se detiene observas que el pedal de freno baja un poco más de lo que estaba, puede significar fuga en el circuito

      Conduce a poca velocidad en marcha larga y acelera de golpe para ver si el motor recupera bien y una vez hayas alcanzado velocidad suelta de golpe el acelerador para ver que tal retiene el motor.

      Deja el coche a ralentí dos o tres minutos después de haber circulado con el, acércate y escucha como suena, el sonido debe ser firme y estable, subidas o bajadas de revoluciones no son buena señal.

      Ponte en la trasera del coche, observa el tubo de escape y pide al vendedor que acelere el coche hasta unas 3000 vueltas para observar, si sale humo azulado o banco, mala señal, es que el coche quema agua o aceite.

      Fíjate al pasar un badén que el coche debe hacer un pequeño rebote después de pasarlo, si no es así y después de pasarlo el coche rebota varias veces esto nos da información del estado de los amortiguadores, no debería rebotar más de una vez, si no tienes la posibilidad de hacer una prueba dinámica de suspensión, apóyate sobre los amortiguadores y suelta de golpe para ver que respuesta tienen.

      Con el coche parado y y arrancado gira el volante en los dos sentidos y observa si al llegar al tope hace un ruido excesivo, cierto ruido es normal, pero no debe oírse de manera notoria.

¿Qué uso se le ha dado?

      Si el propietario te acompaña pídele que lleve él el coche hasta otro lugar y observa si comete fallos como conducir con la mano sobre la palanca de cambios o el pie sobre el embrague, pues estos vicios hacen que las piezas tengan un mayor desgaste.

      Observa el desgaste del volante, el pomo de las marchas y el desgaste de las gomas de los pedales.

      Observa la tapicería de los asientos, puertas y techo así como el cenicero y podrás saber si el antiguo dueño era fumador, en un coche entrado en años esto no suele preocupar pero cuando nos compramos un coche con 25.000 km queremos que esté lo más impecable posible.

      Pregunta al vendedor por el libro de revisiones y observa que todas se hayan llevado a cabo.

      Pide subirlo en un elevador para poder verlo por debajo ya que los concesionarios en las ocasiones en las que limpian el motor, no se preocupan por los bajos y ahí podrás observar si existen fugas de algún líquido.

      Comprueba que todo funciona, cierre centralizado, ventanillas, luces, radio, navegación, aire acondicionado...

      Observa la garganta de las llantas y las pinzas de freno, si el coche tiene tiempo y estas piezas están limpias es síntoma de que el propietario se preocupaba por el cuidado del coche ya que son unas zonas que si no se mantienen por mucho que se pretendan limpiar después no es nada fácil.

      Pasa la yema de los dedos por los discos de freno para observar el desgaste (asegúrate que están fríos)

      Comprueba todos los niveles, manguitos, correas y que los bornes de la batería no estén sulfatados.


      Una vez que nos hayamos decidido, antes de firmar nada apuntaremos el numero de chasis para comprobar que el coche está libre de cargas y llevaremos el coche a un taller de confianza y pediremos que lo revise un profesional.